sábado, 22 de agosto de 2009

La Navidad de 1950, El Inicio....


Voces Risueñas de Carayaca

Como producto del regocijo popular propio de las expresiones más auténticas que se celebran en Venezuela, nacen las “Voces Risueñas de Carayaca”. La Navidad de 1950 sirvió de escenario para que un grupo de parroquianos cultores de la música tradicional, liderizados por Luis Pérez Padilla, Tirsa Alvarez, José María Alvarez y Jesús Mayora decidieran juntar sus cantos y canciones para alegrar las misas de aguinaldos del pueblo de Carayaca. Así, entre aguinaldos y parrandas fue consolidándose la idea de continuar trabajando con una disciplina grupal.

En el año 1953, el grupo adquiere el nombre de Voces Risueñas de Carayaca, inspirados en el coro de un aguinaldo compuesto por el maestro Luis Pérez Padilla.

La agrupación ha sido, desde entonces, contexto de aprendizaje para su región; con un trabajo sostenido sobre la base de distintas generaciones herederos de una sólida cultura popular y hoy representa para su gente y la comunidad cultural de Venezuela uno de los bastiones fundamentales que garantizan la perdurabilidad de los contenidos de carácter artísticos, históricos y sociales que mantienen su vigencia en todas las manifestaciones que el pueblo ha definido como sus irrenunciables valores.

Uno de los objetivos fundamentales de Voces Risueñas de Carayaca durante estos 57 años de actividad, ha sido el de la promoción y difusión de los valores culturales del pueblo venezolano, un pueblo rico en expresiones de corte popular y folklórico, que van desde un sencillo canto de ordeño hasta los festejos mítico-religiosos, donde se encuentran mezcladas nuestras raíces indígenas con el aporte hispano y el legado musical africano.

En 1993, según acuerdo de la Cámara Municipal y la Alcaldía del Municipio Vargas, fueron declarados Patrimonio Artístico Cultural de la región y se otorgó al maestro Luis Pérez Padilla, la orden Diego de Osorio en su segunda clase, por su larga y productiva labor en pro de las tradiciones de nuestros pueblos. En diciembre de 2000, con motivo de la celebración de sus 50 años reciben las Ordenes Guaraira Repano y Diego de Osorio en su primera clase, otorgadas por las Alcaldías de Libertador y Vargas respectivamente; realizan una serie de conciertos en el Aula Magna de la U.C.V., Teatro Teresa Carreño, Plaza Bolívar de Caracas y Plaza Vargas de Carayaca acompañados por la Orquesta Sinfónica Municipal de Caracas, Lilia Vera, Francisco Pacheco y el Coro Sinfónico de Caracas, y hacen la producción de un álbum discográfico doble que recoge su historia musical.

El grupo Voces Risueñas ha sido y se conserva como ejemplo y modelo de organización; escuela de renovación y perdurabilidad que ha logrado mantenerse frente al incesante y complejo proceso de cambios que ha vivido el país durante las últimas décadas, lo que lo coloca frente a la responsabilidad de ir formando a la generación de relevo que más tarde habrá de custodiar y darle continuidad a la riqueza cultural contenida en las distintas expresiones de su tierra.